Este fin de semana, además de sol ha traído concentraciones reactivas de pólenes de cupresáceas.
El polen de las arizónicas y cipreses ha pasado de ser un polen que no producía alergia antes de los 90, a que por el contrario en la actualidad afecte a casi la mitad de los pacientes con alergia pólenes que viven en Madrid.
El cambio climático y la polución, tienen gran parte de la culpa.